¿y si lo cierto fuera...

“¿Y si lo cierto fuera
que la verdad nunca es la verdad
y la mentira nunca es la mentira
sino que la realidad se forja
a golpe de yunque
según queramos ésta sea
verdad o mentira?

¿Y si fuera que convenimos
verdades y mentiras comunes
sin reparar en que la realidad
es mas cruel que una verdad o mentira
y que sea como sea
la crueldad se dará con todo su dolor?

¿Y si fuera que anticipamos
con estas modales palabras
ese dolor pues atenta vilmente
contra el auge de cada cual
impidiendo o favoreciendo avances
que de tan personales que son
toda la estructura social
pueda cuan castillo de naipes
derrumbarse fácilmente?

¿Y si fuera, que los “si fueras”
son la única forma de avanzar
pero tan paso a paso
como que cada uno
sólo es un paso?

No hay verdad que no produzca crueldad
como no hay mentira que no conduzca al favor
aunque la verdad se agarre de la mentira
y ésta la use para avanzar
porque nunca se sabrá su extensión,
ni de la una ni de la otra.

Ciertemente, lo que nos afirma
es saber de la realidad
su verdad y su mentira
y lo que duele es no haberlas comprendido
porque tanto dolor producen
una como la otra,
pero éstas sólo son conveniencias
ante lo que a uno
le permite avanzar.

Quizá en lo pequeño sea fácil de aplicar,
verdad o mentira,
pero las intrincadas relaciones
en que la vida nos embarca
la apetecida verdad paraliza
y la piadosa mentira
nos permite avanzar
porque verdad es quietud
y mentira movimiento.

¿Será por esto que mentimos?
¿Será que la verdad no es suficiente?
¿Será que en el contínuo juego,
involuntario y necesario,
entre lo pequeño y lo grande
toda la vida deba darse?

¡Hay de quien muera en la mentira!
¡Hay quien no sepa nada mas que de verdades!
en ambos casos al dolor de la muerte
el de lo inacabado se le sumará
aumentando su agonía.

Por esto la vida es riesgo
y sin riesgo no hay vida vivida
porque la verdad y la mentira
son como la diástole y la sístole
sin lo cual no hay nada cierto.”